sábado, 4 de agosto de 2012

SI DE DINERO SE TRATA , SIEMPRE HAY ALGUNO CERCA

La relación entre la fe y el dinero: una cuestión por resolver

 
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Riccardo Di Segni
Riccardo Di Segni

El Rabino de Roma Riccardo Di Segni afronta con “Vatican Insider” la «cuestión económica»

GIACOMO GALEAZZI Ciudad DEL VATICANO

Rabino, desde hace siglos la relación entre la fe católica y el dinero es polémica y problemática. ¿Por qué?
 
Debería preguntárselo a los representantes de la fe católica. En general, cualquier religión que interviene con su ética en las relaciones humanas debe ocuparse de los problemas de la economía y del dinero: para establecer qué es lícito y qué no lo es, desde el punto de vista estrictamente jurídico, y cuál es la perspectiva ética y espiritual para juzgar el sentido de una actividad humana dedicada a la ganancia.
 
Los Rotschild fueron durante mucho tiempo los banqueros del Papa. ¿Esto indica que el Vaticano no lograba gestir sus propios recursos financieros?
 
Creo que la relación con los Rothschild no duró más de algunas décadas. Fue una relación poco idílica. Belli les recuerda con un atisbo de antisemitismo en un soneto. Tener asuntos con los bancos no significa incapacidad. Tan solo que hay que elegir a los banqueros correctos. Los Rothschild, de cualquier manera, también tenían sus problemas en Italia. La única filial que no rindió fue justamente la de Nápoles, que fue clausurada con la llegada de los “subversivos”, o sea los “garibaldianos” de la expedición de los “Mil camisas rojas”.
 
Otro aspecto recurrente en la historia eclesiástica es la referencia a los complots de algunos enemigos, como las logias masónicas. ¿Dónde nació este sentimiento de estar en la mira a pesar de haber sido la mayor religión durante siglos?

Cualquier centro de poder como tal sufre ataques. Pero, antes que nada, los ataques provienen del interior. Entre más poder hay, hay más ambición, rivalidad, declive del sentido moral...

¿Hay alguna diferencia entre el judaísmo y el cristianismo al relacionarse con la dimensión material y económica?
 
Existen distintos tipos de judaísmo y de catolicismo. No creo, por ejemplo, que la ética calvinista sobre temas económicos esté completamente en sintonía con la católica. En cuanto al judaísmo, los puntos principales son: respeto de las reglas de las relaciones sociales, comerciales y de producción; respeto de la naturaleza, que no debe ser devastada; inmersión en la realidad de este mundo, pero sin perder nunca de vista la dimensión espiritual. El Sábado es la gran metáfora de este pensamiento: se trabaja durante seis días y se produce; al séptimo se piensa en el espíritu.

¿Por qué un masón está excomulgado “ipso facto” y un mafioso no?
No me toca a mí responder. Todavía no he visto a ningún rabino, y ni siquiera a un judío, formar parte de la autoridad eclesiástica que se ocupa de las excomuniones. La Iglesia tiene verdades absolutas, que descienden de Dios y por lo tanto no se pueden discutir de ninguna forma.

¿Es posible el diálogo con las demás religiones o con la masonería?
Es una pregunta para las autoridades de la Iglesia. La Iglesia, en relación con el mundo hebraico, busca el diálogo. Pero hay que ver qué es lo que se entiende como diálogo... El de la “Dominus Jesus” no era un diálogo aceptable.

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